La isla desierta

En el avión

-A todos los pasajeros nos dirigimos a Nueva York, hora estimada de llegada a las 9:00 h de la mañana.Vamos a proceder al despegue por favor abrochen se los cinturones, gracias- dijo la azafata.
- ¡Menos mal ya creíamos que no despegábamos!- dijo uno de los pasajeros.
Casi todos los pasajeros del avión se habían dormido a mitad de camino ya que despegaron desde las antípodas de Nueva York.Unos de los pasajeros se levantó de su asiento y fue al servicio, por lo tenso que estaba se deducía que o no tramaba algo bueno o no le gustan los aviones, consigo se llevo una bolsa negra. Al salir del servicio fue a su asiento y se limpio el sudor de la frente y se ajustaba el nudo de la corbata, en el pañuelo se podía distinguir un símbolo, parecía de una orden o una asociación. Derrepente el piloto dijo a todos los pasajeros que se abrochasen el cinturón porque había turbulencias. Los pasajeros se despertaron de golpe por culpa de que algo choco con el ala izquierda del avión. Todos gritaron de terror. El piloto se dejo el audífono encendido y en el avión se escucho que perdían velocidad y descendían a una velocidad pasmosa.
Se ollo un estruendo y el avión choco con un paraje natural. Rápidamente el piloto ordeno que evacuaran el avión, mas tarde algunos de los pasajeros que estaban ilesos ayudaban a sacar a los heridos del avión, una vez evacuados todos los pasajeros la cola del avión exploto.
-¡Comandante, que vamos hacer!- dijo una de las azafatas.
-¡De momento tenemos que conseguir todas las medicinas y la radio del avión, avisa a unos hombres, corre!- dijo el piloto preocupado.
-¡Señor ya he encontrado a unos pocos!- dijo la azafata.
-¡Bien vamos!- dijo el comandante.
-Venga ustedes id al botiquín y coged lo el y yo iremos a por la radio.

En la isla

-Ya lo tenemos todo, bien vosotros tres buscar alimentos coged el machete del avión, ustedes a si hay agua potable y yo me quedare y pediré ayuda- dijo el piloto.
Cuando ya atardecia el piloto organizo una reunión.
-¡Bien estamos todos, ¿no?!
Os he reunido para que hasta que nos rescaten estemos unidos esperando a que nos ayuden, pero sobretodo hay que convivir con el mayor respeto posible, que paséis buena noche.

Al día siguiente un grupo de persona se estaban peleando por los víveres ya que escaseaban, despertaron al piloto, el piloto medió en la pelea.
-¡Pero que fue lo que dije anoche!- dijo alterado.
-¡Teníamos que convivir como personas no como animales, sois como niños!- dijo en alto.
-¡Me da vergüenza ajena!- dijo.
-¡Pues entonces vete a otro sitio!- dijo un muchacho alto.
El piloto y algunos que le seguían se fueron a otro lugar de la isla. Al cabo de una semana el grupo del piloto estaba intentando contactar con alguien por la radio hasta que un día...
-¡S.O.S.! ¡S.O.S. estamos en una isla necesitamos ayuda el avión en el que íbamos se estrello hace mas o menos una semana, ayuda!
-¡Tranquilos enviaremos avionetas de reconocimiento por la zona!- dijo el hombre.
-¿Pero por donde os abéis chocado?- dijo angustiado.
-Después de sobre volar África- dijo el piloto.
A la hora de comentárselo al otro grupo encontró que casi todos estaban casi desidratados y entonces con ayuda de los demás fueron trasladando se al lugar en el cual estaban asentados el grupo del piloto, mas tarde les ofrecieron la poca comida y agua que les quedaban.
Al anochecer el hombre que dijo al piloto que se marcharan pidió disculpa y el piloto volvió a repetir las mismas palabras sobre como debian convivir y todos los pasajeros estuvieron contentos, su ''tribu'' se basaba en la amistad, el respeto, saber convivir en armonía y en compartir y ayudar con los demás.
Al cabo de dos días oyeron un sonido parecía el de un avión, todos dejaron lo que estaban haciendo y fueron a la playa, todos lloraban de la emoción de ver el hidroavión que espera para la ecuación de las personas. En Nueva York fueron recibidos como los mayores supervivientes, después de que termino esta odisea todo el mundo sabio de ellos y todos se reunieron con sus familiares.
FIN